Dos autobuses quedaron incrustados entre el hielo y la nieve, a raíz de una fuerte nevada en la localidad de Omaha, en pleno corazón del estado de Nebraska (Estados Unidos).
Kevin Carter, quien tomó la foto, ganó un Premio Pulitzer por este trabajo. Fue objeto de un juicio por pasar más de 20 minutos para tomar esta imagen en lugar de ayudar al niño.